El que a hierro mata a hierro muere.
Es lo único bueno de esta guerra. Que los criminales también están tomando de su propia medicina.
Aunque los responsables están cómodamente apoltronados en sus despachos sonriendo por sus estupendos beneficios económicos.
Y ellos están en un escalón superior, ajenos a la justicia divina o humana.
Por eso, considero, con el respeto oportuno, que no está mal que quien enfunda un fusil para matar personas dé justa recompensa a los gusanos.
Buen provecho para los gusanos!
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